La intimidad, o cercanía emocional con otra persona, nos hace vulnerables. Aun así, es una de las experiencias más satisfactorias que los seres humanos podemos tener.
"La intimidad es la comida casera para el alma en un mundo de comida rápida para llevar.” ~ Psychology Today
Acercarnos a otra persona nos saca del aislamiento y nos acerca un poco más al misterio de la creación humana. Ya sea en una relación romántica o de amistad, la intimidad es lo que las personas más desean en sus relaciones con los demás.
¿Cómo podemos acercamos a otra persona?
"La intimidad comienza cuando una persona comparte con alguien más algo emocionalmente significativo,” dice el psicólogo Harry Reis. Es un proceso de desarrollo gradual durante el cual las personas se van abriendo y entendiendo mutuamente. La intimidad da una sensación de que la otra persona realmente entiende cómo eres. Es una exploración de uno mismo y de la otra persona.
La profundidad de este tipo de relación no puede lograrse en un mundo basado en la comunicación de textos, mensajes rápidos, y días repletos de obligaciones que nos impiden vernos en persona y formar relaciones basadas en el calor humano y la confianza mutua. Sin duda alguna, todas las personas queremos esa intimidad con alguien sin embargo nos damos poco tiempo para desarrollarla.